Para esta pieza de vidrio la hice a partir de escaneos 3D de estructuras de arenisca que traje de un corto viaje de escalada en Albarracín, España. ⁠
 A partir de este material digital desarrollé dos positivos que eran positivo y negativo entre sí y los imprimí en PLA. Hice un negativo de silicona de ambos. Esto me permitió usar el material sobrante para fundir piezas en moldes. Las estructuras fundidas se colocaron en un marco, se soldaron con placas de metal, se precalentaron y se soplaron con vidrio.
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 A estas alturas de mi vida, en 2021, podría haber hecho cualquier cosa y no haberme gustado. Me presioné tanto para hacer algo especial, algo grandioso, algo nuevo, que terminé paralizado.
 Después de mantener este jarrón oculto durante tanto tiempo, decidí fotografiarlo. La fotografía macro me ayuda a olvidar todo lo que me rodea. Aunque no me guste el panorama general, este medio me permite ver mi trabajo desde una nueva perspectiva.
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 Con el tiempo, me di cuenta de que este trozo de vidrio es un símbolo para mí de seguir adelante y no pensar demasiado en mi propio trabajo artístico.